1. Fundir la manteca en una cacerola, añadir la harina y cocinar durante 2 minutos a fuego bajo sin que la harina tome coloración.
2. Incorporar la leche preparada batiendo con un batidor para que no se formen grumos y luego continuar revolviendo con una cuchara de madera hasta que rompa hervor y espese.
3. Condimente con sal, pimienta blanca y nuez moscada.
4. Ideal para gratinar pastas, panqueques, verduras etc.
Comentários
(0)
¿A quién consentiste con esta rica receta? Cuéntanos cómo te quedó.